Y así, como por arte de magia luego de dos cafés, a la musa le da con aparecer.
Quizás no es el mejor momento pero mi cuerpo está lleno de esas sensaciones que le gustan a ella, las cuales producen reacciones que me hacen tomar lápiz, papel y empezar a desarrollar sentimientos ocultos, aquellos que ahora tengo a flor de piel.
En ocasiones no entiendo el porqué y hasta creo que debo seguir sin entender, sin comprender lo que desata mis locuras plasmadas en un papel.
Yamell Montero.
1 comentario:
Locuras que nos mantienen vivos en este oceano de momentos, fortuitos encuentros con nuestro ser y nuestros sentimientos, que nos llevan a ir conociendo de que estamos hechos, de pasion y versos.
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